Coplas del chiringuito

II

Vacaciones al sur del sol,
el mar y la playa,
de la ruina romana a la alcazaba,
sierra, sombrilla y albero.
De Tarifa a Ronda,
de Granada a Estepona.
Medito y digo al camarero:
una de puntillas, otra de pijota,
venga mojama, chopitos y espetos,
con fino y cerveza fresquitos
todo dispuesto, y pónganos otra ronda
de gambas a la plancha para luego.
Que viva el socialismo campante
que prometiera Blas Infante.
Ojú qué jartá,
Jodo qué aje.

Si África principia en los Pirineos,
Europa en Gibraltar;
Roca, faro y puerto,
lavadora y secadora
de tanto trinque berberisco,
y tanto mono por los riscos.
La cueva de Alí Baba
que mantienen el señorito del fino,
Mohamed y el british gentleman.
Gibraltar vigía desafiante del islam
cuando Andalucía sueña
con el califato omeya medieval;
abdicación de la soberanía nacional
mientras pide el peñón español.
Prefiero el ojo avizor del lord
que de condes don Julián la traición.
Hellow, mister John;
¡Alá Akbar!;
Olé el paraíso fiscal.

Andalucía querida,
primor del mediodía,
quejido de petenera,
herida por bulerías,
dorada marisma tartesia
finis terrae de Hesperia,
del mare nostrum
non plus ultra frontera
que hasta más allá
de América fuera;
de la mar salada el garum
para condimento del césar;
torre vigía al África musulmana
de brillos y cicatrices taraceada,
esmaltada, a cuerda seca modelada;
sangre en el albero del ruedo
y en los campos sudor a fuego;
filo del sol ardiente,
lecho de amantes perfumado,
de mirtos y launa arropados;
gemido del agua que leve
se alza, brota y me conmueve.


¡Ay, Andalucía!,
¡cuánto me duele
cuando se levanta,
cuando grita y canta
tanta desesperanza
a la reseca suerte
del tiempo sometida!

Tirititrán, trán, trán,
Tirititrán, trán, trán,
Tirititrán, trantero,
Tirititrán, trán, trán.
Olé, qué aje.

Ozú, qué arte.